jueves, 17 de febrero de 2011

...de cierto tipo de clientes

La semana pasada platicaba con dos amigos acerca de los clientes "complicados" y como muchas veces tenemos que tragarnos el orgullo, hacer un nudo en la garganta para no decir lo que pensamos en el momento, y calmarnos.

A lo largo de la vida en general y de la vida laboral nos topamos cada cierto tiempo con una persona así, de esas que te sacan te tus casillas solo por el placer de hacerlo, porque saben que tienen "el poder" de hacerlo, porque esperan que no les respondas, porque hacer menos a los demás, y tratarlos de incompetentes hacia abajo, los hace sentir "grandes".

Sin embargo, los años de experiencia, que pueden no ser muchos, pero que ya suman casi quince desde que me gradué, me han enseñado que es difícil razonar con la pared; que es difícil hacer entender a quien no quiere hacerlo, a quien pretende imponer su voluntad como una verdad total y absoluta; es así como, con el tiempo (y a fuerza de unos cuantos golpes en el orgullo) he aprendido a tratar con personas así; aunque siendo sincero, eso no quiere decir que solamente los tolere y "aguante vara" por el simple hecho de que no van a modificar su posición, no señor!, la clave está en saber cuándo abrir la boca, cuándo los argumentos que puedas presentar serán tan contundentes que ni los gritos y manotazos pueden ocultarlos, y es ahí, donde finalmente se obtiene la recompensa, la satisfacción de probar que se tenía razón.

No puedo negar que el nudo en el estomago sigue ahí cada que hay que lidiar con alguien así, pero hay que entender que es normal encontrarlos, hasta común, eso no va a cambiar.

Al final, cada quien su estilo de hacer las cosas. Yo? yo opto por las razones, por utilizar el sentido común, por convencer en vez de obligar, quienes te rodean lo valoran y lo agradecen...

...y eso hace la vida mas fácil.

martes, 8 de febrero de 2011

...de noches viendo fotografías.

Hijito:

Hace días mientras veía un grupo de fotos tuyas, nuestras, me puse a pensar...y a recodar. Te cuento:

Antes de ti, ya te lo he dicho, yo no era un "papá" era solo un señor, aunque en lo que a mi concierne, era un niño jugando a ser adulto; luego, llegaste tú.

Muchas veces me habían dicho como un hijo "te cambia la vida", pero créeme, nada podía prepararme para la alegría tan grande que sentí cuando vi tu cabecita salir del vientre de tu mami. Nada de lo que hubieran dicho podría haberme preparado para el amor que surgió en cuanto te tuve por primera vez entre mis brazos, con tus ricitos húmedos y tus párpados hinchados.

Un rato después, en la capilla del hospital, con el amor mas grande que jamás había sentido, tuve que pedir ayuda. Ayuda para entender como manejar un sentimiento tan sublime, tan vasto, tan fuerte, pues al mismo tiempo, me sentí indefenso. Un amor tan grande, y yo tan pequeño. No se si fuera o no merecedor de una bendición tan grande, pero si El, el de arriba te puso a mi cargo, yo te recibía con un amor total, incondicional e indestructible.

Ha pasado ya un tiempo desde ese día, pero cada vez que te veo al despertar o al regresar a casa, no puedo evitar que mi corazón se acelere, no puedo evitar emocionarme en redescubrir a través de tus ojos hermosos cada una de las maravillas que tiene este mundo y que como adultos la mayor parte del tiempo damos por descontado.

Por favor ten paciencia si a veces no entiendo que apenas estas creciendo y que hay muchas cosas que para ti son nuevas y que te tomará tiempo aprender a hacerlas o entenderlas.

Gracias hijito, porque tú me enseñaste el amor que solo se puede tener a un hijo, ese que no se puede explicar con palabras, que no se puede transmitir, que solo se obtiene al ser padre.

Gracias por hacerme comprender la fuerza que tiene la palabra "hijito" tantas veces pronunciada por mi padre.

Gracias, chaparrito, porque tú siempre serás quien me convirtió en un PAPÁ.

...de Coches

Puede que solo sea yo y como percibí las cosas desde niño, pero me parece que en Monterrey, la cultura de tener un buen coche, nos viene desde la niñez.
Recuerdo que en primaria, uno de mis amigos que manejaba un Volkswagen Safari, obviamente no era el mejor de los coches, pero en sexto de primaria, andar en coche era una exageración. Luego en secundaria, otro amigo traía coche, esta vez un Tsuru II, bastante mas defendible y también, bastante mas ligador.

En fin, con lo anterior quería hacer patente el hecho que desde niños nos hacen (o nos hacemos) soñar con manejar un coche super equipado, con sonido, el más nuevo que puedas comprar, etc. Al punto de que uno de los primeros "logros" en la adolescencia, es obtener la Licencia de Conducir.

Oviamente con el uso del coche, en muchos casos llega el uso desordenado e irresponsable del mismo, derivado del "poder" que confiere el controlar una maquina como esa.

El caso es que, ya teniendo uno, hay que cuidarlo como si fuera un hijo (siempre he pensado que mi primer coche sabía exactamente cuando eran los días de pago, dado que invariablemente se descomponía al día siguiente de cobrar), solo lo lavas/enceras tú mismo, le cuidas todo detalle, porque, en ciertos entornos y a cierta edad, el coche que manejes, influye en la percepción que de ti se tiene (se acepte este hecho o no).
Eso, siempre me había parecido común, aunque no tan "normal", como en los casos en que algunas personas llevan lo anterior  al extremo y tienen vehículos que dificilmente pueden pagar, sacrificando otras cosas igual o mas importantes. En fin, cada quien su vida y su varo.
Un escenario muy diferente a lo que he encontrado en estos años viviendo en la frontera, donde obviamente también se valoran los buenos coches, pero desde una perspectiva diferente, considerando que acá puedes facilmente conseguir, por ejemplo, un Lexus "viejito" por US$500, usarlo 6 meses y cuando éste se descomponga, dejarlo en un yonke y obtener quizá US$100 por él. Eso significa que por algo alrededor de los US$85 al mes puedes tener un coche bastante "decente" para moverte, esto sin considerar que estos autos, en muchas ocasiones no pagar ni placas, ni tenencia, ni mantenimiento. De lujo, no? Para qué quieres autofinanciamiento?

Como consecuencia, hay mucha gente que, maneja sin saber manejar, lo que genera, desde algunos accidentes de verdad increíbles, hasta otros en que, a pesar de haber chocado, ambos conductores siguen su camino como si nada hubiera pasado; de verdad sorprendente y en ocasiones hasta divertido.

En esta frontera (imagino que en otras será igual o muy parecido) los autos son eso, autos, medios de transporte, no un elemento de veneración, ni símbolo de status. Al final, hasta podría resultar más sano así (por lo menos para el ego).

viernes, 4 de febrero de 2011

...de jugar "a las carreritas"


Que increíble es ver correr a un niño! pero mas me sorprende/divierte el ver que una vez que aprenden a correr, a todos lados van corriendo, aunque no haya prisa por llegar, aunque vayan al cuarto contiguo, aunque reboten en la puerta mas cercana.
Siendo sincero, lo anterior lo noté después de leer un libro muy bueno que en cierto momento hace referencia al tema de los niños y de como al crecer, dejamos de hacerlo...

De una manera u otra, siempre he estado acostumbrado a hacer ejercicio o practicar algún deporte (aunque debo reconocer que JAMAS fui bueno para el soccer, lo que en si, será tema algún día), el caso es que, siempre he estado cerca de la actividad física.

La ocasión anterior que empecé a correr, fue a raíz de que mi hijo mayor empezó a caminar, lo que generó en mí la imperiosa necesidad de darle alcance sin morir en el intento, luego, al nacer el segundo, las desveladas pasaron su cuota y tuve que suspender las levantadas temprano "por gusto".
Luego, en julio pasado, sucedió algo que me hizo correr nuevamente: Leí. Leí un post en un blog que me recordó esa sensación que solo da el hacer algo tan natural, tan edificante y tan adictivo.

Fue así como volví a emular a Filípides y su carrera a Atenas. (Para conocer más del tema, da click aquí).

 


La diferencia fue que esta vez, fue programado, con metas establecidas, lo que con el tiempo me ha ayudado a mejorar tiempos y distancia, es así como entre mis objetivos (por no decir propósitos de año nuevo, dado que tienen la "cualidad" de no cumplirse) decidí correr dos medios maratones al año, en marzo voy por el primero.

Al principio, solo busqué lograr lo que se define como "carrera estable", es decir, correr por un determinado tiempo, constantemente; Luego, por tiempo; después, distancia; ahora, reducir tiempos. Todo es cuestión de tenacidad. La buena noticia es que, conforme vas practicando, mas te vas enganchando, y como consecuencia, menos te cuestan los esfuerzos mayores, lo que te lleva a intentar mas, y querer mas.

Hoy, tengo una idea, que quizá sea un sueño guajiro, pero espero por lo menos una vez en la vida, correr la prueba original, correr el maratón de Maratón a Atenas.

Quise compartir esta experiencia, porque mucha veces me preguntan como puedo levantarme temprano a correr y, aunque no soy de aquellos que despiertan a las 5 para correr a las 5:30, tampoco era de los que corrían en fin de semana o en días festivos, pero, este deporte te atrapa. yo no se si llamarlo adicción, pero sé que lo días que no corro, muero por hacerlo.

Hagan la prueba, no hay deporte mas "natural", fácil de practicar, benéfico para la salud, estimulante, ni mas instintivo.

Estamos hechos para correr!